¿De repente, “Wicked” se ha convertido en una de las favoritas al Oscar?
La respuesta es sí, pero la gran pregunta es: ¿está la comunidad cinéfila más puritana lista para esto?
En muchos aspectos, “Wicked” no es “La La Land”, ni “Oppenheimer” pero tampoco es “Barbie”. Para muchos, premiar un producto comercial de este nivel no debería ser la meta de los Oscar, pero, a la vez, tampoco debería serlo premiar películas más independientes como “Moonlight”. Aunque estos son los mismos que se olvidan que los Oscars premiaron a “Gigi”, “Un americano en París” o “La vuelta al mundo en 80 Días” o “El gran espectáculo del mundo”.
Para algunos, los Oscar deberían ser territorio de esa película revestida de aparente seriedad, cine clásico y cierta grandilocuencia, con temática "dramática" (que pocas comedias han ganado el Oscar!!). Pero la realidad es que películas como “Oppenheimer” no aparecen con tanta frecuencia en nuestros tiempos, y la industria parece más enfocada en títulos como “Wicked”, “Del Revés 2”, o, en el extremo opuesto, producciones como “Anora”, “Emilia Pérez” o “Cónclave”.
Una de las claves que a veces obviamos es que los Oscar son los Oscar, y no siempre (por no decir nunca) existen para premiar la "mejor película" del año.
Los Oscar son efímeros: cuando se entregan, ya está en marcha la siguiente competición. Representan un periodo de tiempo corto, y muy vinculado a estrategias comerciales, mediáticas, y políticas industriales y sociales. No tiene nada de malo, pero es necesario entenderlos como son: una representación de los intereses y afinidades dentro de la industria.
Tengo mis dudas con “Wicked” pero creo que está en posición de lograr lo que “Barbie” no logró. Es popular, apreciada por la crítica, y culturalmente muy relevante en US. Pero ojo, queda mucha temporada por delante y, este año, a diferencia del pasado, no hay una clara favorita.
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